Frente a la escasez “estructural” de las oportunidades de empleo, surge la necesidad de crear el propio trabajo y por ende, encontrar una actividad económicamente rentable y sustentable en el tiempo. Esta tendencia crece por los altos índices de desempleo, la subocupación, los contratos de trabajo perversos y la violencia existente en muchas empresas hacia sus empleados.
El trabajo por cuenta propia representa un gran porcentaje del total de ocupación en Europa, y subiendo si tenemos en cuenta el crecimiento de los nuevos trabajos flexibles y de contrato en los sectores de los servicios en rápido desarrollo. El trabajo autónomo conlleva una condición de seguridad social, fiscal y económica.
Pero, ¿existen mitos y verdades en el empleo por cuenta propia? Porque ser el propio jefe significa estar dispuesto a trabajar 12 horas o más, poder e independencia significa toma de decisiones y elección de opciones, ser dueño quiere decir afrontar los riesgos y responsabilidades sobre la marcha del negocio o generar ingresos y ganancias es autosustentarse económicamente.
Actualmente, en muchas CCAA existen subvenciones y ayudas para fomentar la actividad empresarial autónoma por la repercusión que tiene no sólo en el sujeto, sino también en la economía de su región. Concretamente en Madrid existen numerosas asociaciones que se encargan de poner en práctica estas iniciativas emprendedoras mediante la formación, apoyo y tutelaje de las personas que se inclinen por esta iniciativa.
Entre las que proponemos encontramos el Instituto Madrileño de Desarrollo (IMADE) que pone a disposición del usuario toda la información referente a las ayudas, normativas y herramientas para la constitución de empresas. Por otro lado, más centrado en los jóvenes emprendedores encontramos, la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE) creada en 1984 y en la que ofrece servicios de asesoría, jornadas formativas etc.
También es interesante a nuestro parecer conocer las asociaciones centradas en la creación de empresas solo para mujeres. Entre estas destacamos en primer lugar la Fundación de Mujeres cuyo objetivo principal es la integración de de la igualdad de oportunidades en el funcionamiento del mercado de trabajo. En segundo lugar, la Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid (ASEME) nacida en 1971 para promover el pleno desarrollo de la mujer como empresaria
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